La mitología cántabra son cuentos, leyendas y personajes que tienen su origen en los mitos celtas y romanos, dada la influencia que estos pueblos tuvieron en las regiones del norte de España.
Estos cuentos y leyendas se han ido transmitiendo entre generaciones de forma oral y por ello varían tanto dependiendo de la comarca en la que se cuenten (sucede lo mismo con las canciones populares).
Los personajes de la mitología cántabra tienen estrecha relación con seres de la naturaleza, duendes con forma de árboles, seres monstruosos que habitan en los frondosos bosques de Cantabria o hadas que habitan en los valles con más encanto de la tierruca.
A continuación os presento a los seres mitológicos más conocidos en Cantabria:
El Ojáncano
Es la criatura más malvada que habita en Cantabria, ya que se alegra de los males de los hombres y de las destrucciones de las cosas. Tiene unas grandes barbas que le tapan toda la cara y solo tiene un ojo en la mitad de su frente. Se cuenta que entre su barba tiene un pelo blanco que si se lo consigues quitar, muere inmediatamente.
Son muy fuertes, por ello cuando hay vendabal y se caen los árboles que están cerca de los ríos, sus barbas se enredan por el viento en los árboles y es el Ojancano el que los tira al suelo.
Es tan malo, que otras veces baja a los valles para romper puentes, robar ovejas o destruir las cosechas de los campesinos.
Las Anjanas
Son los seres más bondadosos de Cantabria. protege a las personas honradas y a los enamorados. También a los caminantes que atraviesan los senderos de los bosques y montes.
Las Anjanas son mujeres de rostro fino y cuerpo atractivo, sus cabellos son largos y finos. Se visten con finas sedas y llevan un báculo con las que realiza magia y curas milagrosas.
Son hadas buenas que habitan en las montañas y están llenas de virtudes.
El Trenti
Son duendes cubiertos de hojas, sus extremidades son ramas de roble y su pelo es de musgo. Son muy bromistas y pícaros. Se esconden en arbustos y matorrales para poder sorprender a las muchachas y tirarlas de las faldas.
Suelen ayudar a los hombres sin que estos lo sepan, siendo particularmente buenos con los niños. Cuando alguien pierde algo, se entona una canción y el Trenti es quien se encarga de encontrarlo.
Los Nuberos
Son los genios traviesos y maliciosos que montados en nubes grises se divierten provocando tormentas con la 
intención de asustar con sus rayos a los animales y destruir con el granizo las cosechas de los hombres.
Son pequeños, de cara maliciosa y aspecto obeso. Siempre aparecen montados en sus nubes que ellos mismos crean y desde ellas controlan el granizo, el rayo y la lluvia. Crean sus nubes gracias a un poder especial que tienen y no les son necesarios componentes para realizarlo. También pueden invocar rayos a voluntad, y no dudarán en utilizarlos como armas si son atacados o molestados. Los nuberos suelen cometer sus fechorías a antojo pudiendo incluso reunirse varios de ellos para juntos formar un gran nubarrón de tormenta con la que divertirse.
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Como podeis comprobar, lo que se pretendía antiguamente con estos seres y sus fechorías es justificar las cosas que sucedían por causas naturales para no asustar a los niños. Los Ojáncanos eran los responsables de tirar los árboles (no lo era el viento), las Anjanas ayudaban a los caminantes, el Trenti era quien ayudaba a encontrar las cosas cuando perdías algo por despiste o los Nuberos son los encargados de las tormentas.
Hay muchos más seres mitológicos, que podeis vosotros incluir con vuestros comentarios. Dentro de poco crearé una página en el blog dedicada solamente a los seres de la mitología cántabra
